La modalidad del presunto engaño era vía internet.
En la jornada del jueves 1 de octubre del corriente se llevó a cabo en Rawson una audiencia de apertura de investigación por el delito de estafa en concurso real por tres hechos en calidad de autor por los que se acusó a César Hernández.
La acusación, a cargo del representante de la fiscalía Leonardo Cheuqueman, estableció que los tres hechos endilgados a Hernández se concretaron mediante la estafa a través de internet.
El acusado utilizaba un perfil en la red social Facebook en el que promocionaba la venta de diversa mercadería. En este caso Marianela Farfal, Martín Videla y Noelia Noir, todos de Rawson, se contactaron con Hernández a mediados de febrero de 2020 interesados en comprar lo que vendía el imputado previa transferencia a la cuenta bancaria.
Chatrán
El imputado en esta causa resultó estar condenado anteriormente por delitos similares. César “Chatrán” Hernández, así está apodado, es un tristemente célebre delincuente que “opera” en el territorio chubutense y también en Santa Cruz. Por caso, en este año fue demorado por la policía en la localidad de Caleta Olivia, en el marco de una causa que investiga unas estafas cometidas en la localidad de 28 de noviembre de la vecina provincia.
Paralelamente a esta causa iniciada en su contra, “Chatrán” fue notificado de cuatro causas más por el delito de estafa en Chubut. Por estas últimas, deberá presentarse ante la Fiscalía de Esquel.
Incumplimiento de contrato
A su turno el defensor del imputado, Dr. Daniel Fuentes, no se opuso a la apertura de la investigación, a la imputación incoada, ni tampoco al plazo procesal establecido para ello. Pero sí hizo una consideración respecto de la hipotética participación de su representado en los hechos: “…sí mi defendido participó en eso, tal vez podría tratarse de un incumplimiento de contrato…”, remató el letrado.
Llamado de atención
Una enérgica reprimenda recibió el imputado al comienzo de la audiencia. El juez Sergio Piñeda, interrumpió el relato que venía haciendo el funcionario de la fiscalía: “… perdón, discúlpeme, usted señor Hernández ¿está leyendo un libro?…”.Ofuscado el magistrado le recordó que todos los allí presentes lo estaban a raíz de su presunta conducta delictiva. Le pidió que guarde el debido respeto y lo mismo le sugirió al abogado defensor para que lo asesore en ese sentido.
El imputado pidió disculpas y aclaró que en realidad estaba repasando la acusación en su contra. Finalmente, el juez Sergio Piñeda decidió la apertura de investigación por el plazo de 6 meses.