Se realizó el pasado lunes 18 de octubre del corriente la primera reunión destinada al seguimiento y control de la puesta en marcha de las Oficinas Judiciales de Gestión Unificada para el fuero no penal, en un proceso que irá avanzando en un plazo estimado de cinco años.
Implementación
El Dr. Guillermo Cosentino, Secretario de Planificación y Gestión del STJ explicó que se trató de una reunión introductoria respecto a las Oficinas Judiciales del Acuerdo Plenario N° 4996/2021, convocada por la administración general y con todas las áreas establecidas en la acordada para concretar la implementación de las Oficinas Judiciales de Gestión Unificada de los fueros Civil y Comercial, Familia, Ejecución, Laboral y Multifuero.
“A partir de ahora empieza un plan de trabajo a cinco años para que podamos tener implementadas oficinas judiciales en toda la provincia, así como se hizo en su oportunidad con el fuero penal” explicó Cosentino y detalló que se trata de un proceso que “no puede impactar en un presupuesto, sino que debe ser llevado a través de cinco años, en cinco presupuestos que deben ir contemplando paulatinamente este plan”.
Definir acciones
Durante el encuentro preliminar se hizo la presentación del proyecto a las áreas involucradas en el plan de implementación y seguimiento. De acuerdo a lo expresado por el titular de la Secretaría de Planificación y Gestión, en el encuentro quedaron planteadas “las necesidades de ir constituyendo las herramientas que le van a dar soporte al proyecto, se empiezan a definir acciones, estamos en los primeros pasos donde un poco todo el mundo empieza a tratar de trasladar desde cada una de las áreas involucradas en este proceso de cambio las inquietudes que tienen y participan en la construcción de herramientas de cada área, de manera colaborativa se van a ir aplicando al desarrollo del modelo en general”.
Cosentino indicó que se trata de una experiencia muy distinta a lo que fue en su momento la implementación de las Oficinas Judiciales en el fuero penal, “que se hicieron en un contexto muy diferentes y la Sala Penal que condujo ese proceso tuvo seis meses para implementarlas; nosotros ahora tenemos cinco años, es un proceso paulatino, de cambio cultural, distribuido en distintos presupuesto lo que nos va a permitir aprovechar la experiencia de quienes trabajamos en aquella implementación para corregir algunas situaciones producto de aquel momento de urgencia. Entiendo que ahora vamos a traducir esa experiencia en una herramienta más eficaz, más eficiente y con mayor participación del sistema y de los integrantes del mismo”.
INFORMA: Agencia de Comunicación Judicial / Superior Tribunal de Justicia