Estuvo nuevamente en Chubut invitado por la Escuela de Capacitación Judicial para dictar una capacitación en relación a la figura del Abogado del Niño.
Este curso se desarrollará durante 8 encuentros a lo largo del año, aproximadamente uno por mes hasta octubre. El Dr. Carlos Antonio Romano visitará, además de Rawson, las sedes de Comodoro Rivadavia y Esquel, para tomar contacto con los participantes y dar las clases vía videoconferencia.
Romano se ha desempeñado como magistrado durante veintiséis años. Fue Juez del Trabajo y Juez del Niño y la Familia. Fue Asesor “ad honorem” en Cancillería, Embajador “ad honorem” y Emisario Presidencial en asuntos vinculados a cuestiones de Estado Respecto de la Niñez. Miembro en Misión Extraordinaria Especial como Experto en los Derechos del Niño por la República de Guatemala. Asesor por Argentina ante la Convención de La Haya. Enviado Presidencial a Medio Oriente. Su trabajo fue declarado de Interés Legislativo por el Honorable Senado de la Nación. Es docente universitario de posgrado. Escritor y Ensayista. Especialista en Administración de Justicia. Es autor de gran cantidad de obras sobre su especialidad.
Durante su estancia en Chubut, Romano dialogó en exclusiva con la Agencia de Comunicación Judicial para JusNoticias:
¿Dr. Romano, nuevamente por Chubut, cual es el motivo que lo trae a Ud. a la Escuela de Capacitación Judicial?
Es un placer estar nuevamente en Chubut invitado por el Superior Tribunal de Justicia para dictar una capacitación en referencia a la figura del Abogado del Niño.
¿No existe en Chubut esa figura?
Existe en los hechos, en algún acercamiento para hacer de abogado del niño por personal judicial, en un esquema de aporte, pero como ley específica, todavía no.
¿Qué es la figura de Abogado del niño?
Yo siempre digo que es una figura de acompañamiento y hay que diferenciarla de los asesores de menores o defensores de menores en algunos distritos. Es una figura de acompañamiento que brinda asistencia técnica y jurídica, así está previsto. Y que tiene como valor fundamental trasladar lo que escucha del niño al juez o a un operador del derecho, en el ámbito administrativo. Es una escucha que acerca de una manera técnica, con todos los esquemas de defensa y que fundamentalmente tiene que ver con defender todos los derechos del niño.
¿Hay que promover una ley para que esa figura comience a existir en el ámbito del Poder Judicial?
Yo creo que promover una ley es interesante y hay diferentes formas de promover una ley de esas características. Yo lo propuse en Buenos Aires porque fui invitado a trabajar técnicamente en ese sentido y dónde está esa legislación hay buen resultado aunque le cuesta un poco a la gente admitir esa figura en sí. Hay que saber trabajar en ese sentido, hay que formar a un buen profesional para esa labor, y también le cuesta a los jueces entenderlo…
Por lo visto la resistencia al cambio es cultural…
Totalmente. Y esto tiene que ver con una contracultura hacia el reemplazo, nosotros acostumbramos a reemplazar a los pibes, hasta cuando los queremos los proteccionamos y los sustituimos y creemos que el amor se maneja así. Y esta figura es justamente acompañarlos y llevarlos de la mano con información necesaria para el juez.
¿En cuantas provincias existe esta figura y su legislación correspondiente?
Y, deben ser ya unas diez provincias que ya están trabajando.
¿Desarrollan esta tarea en el ámbito del Poder Judicial?
No, casi ninguna, salvo una que es la provincia de Salta, que hizo su reforma en Niñez en diciembre de 2016, pone la figura del Abogado del Niño pero dentro del Ministerio Tutelar. También se abre un registro de abogados, de hecho he estado capacitando en Salta para esta figura de Abogado del Niño y ya abrieron su registros con varios abogados anotados y trabajando. Yo creo que el criterio de utilidad y el planteamiento es para comenzar a entender que hay zonas de los servicios asistenciales, Salud, Educación y Justicia, que tendríamos que tercerizarlos, y esto no es privatizar porque justamente uno terceriza en quien sabe que puede tener un control más que nada en el orden público. Colegios de Abogados y las Universidades son buenos niveles para tercerizar una actividad que está haciendo falta y que es que los chicos sean escuchados en los tribunales.
¿Cuáles son los contenidos esenciales del curso que comienza en Chubut, que lo traerá a esta Escuela de Capacitación Judicial durante ocho meses, una vez por mes?
De arranque comienzo a hablar de Derechos Humanos y el sistema universal y tiene que ver porque justamente estamos hablando del derecho humano más encomiable que es el de niñas, niños y adolescentes. El objeto que hacerlo cada vez más práctico a partir de la existencia de una contradicción entre los derechos que declamamos y los que realmente se ejecutan. Yo pretendo que los operadores vean la inconsistencia de una práctica que contradice lo que está dicho a nivel internacional.
¿Cuál es su expectativa para esta capacitación; hoy veo mucha gente en la ECJ?
La realidad en este caso es mayor a lo que pueda tener de expectativa; fluye, la gente ya comenzó a participar.
¿Esta figura del Abogado del Niño, si se instrumenta en Chubut, en cuál de las tres grandes áreas del Poder Judicial debería estar? En la Defensa?
Sí, en la Defensa específicamente. Está pensada para, que de estar en el Poder Judicial, esté en la Defensa. Alguna legislación lo pone como una figura afín al Asesor de Menores y es justamente todo lo contrario. El Asesor de Menores tiene que estar porque hace una defensa del orden y el Abogado del Niño lo que hace es una defensa del niño en sí, bajo su conocimiento técnico.