Fue en un encuentro de fútbol barrial.
La jueza penal María Tolomei resolvió mantener la prisión preventiva sobre Ernesto Alejandro Roberts, principal y único acusado por el delito de tentativa de homicidio, a quien ya se le había dictado una medida de coerción por un plazo de tres meses.
La magistrada tomó la resolución en el marco de una audiencia de revisión desarrollada este lunes 13 de marzo de 2023 en el tercer piso del edificio de tribunales de Trelew. Ernesto Alejandro Roberts está imputado por el delito de tentativa de homicidio, dos hechos en concurso real en carácter de autor, por los hechos ocurridos en la tarde del 15 de octubre de 2022 en un predio ubicado en proximidades de las calles Oris de Roa y Centenario de esa ciudad, y en el cual resultaron víctimas Nicolás Brizuela y Luis Hueicha.
Los hechos imputados
De acuerdo a la acusación del Ministerio Público Fiscal, los hechos a investigar se produjeron el pasado 15 de octubre por la tarde cuando Ernesto Alejandro Roberts, junto a un familiar arribaron a las canchas de “Marquitos” a bordo de un vehículo Volkswagen Gol color negro. En ese lugar se desarrollan habitualmente campeonatos de fútbol amateur.
En ese contexto, el acusado bajó de su auto portando un arma blanca a la vista de una gran cantidad de personas, se dirigió caminando en forma directa hacia uno de los espectadores, identificado como Nicolás Brizuela y sin mediar palabras, lo atacó violentamente, propinándole varios golpes de puño hasta derribarlo y una vez que lo tuvo en el piso se arrojó sobre él y comenzó a aplicarle una gran cantidad de puñaladas, orientadas a matar, lesionando a su víctima en gran parte de su cuerpo.
El accionar de los testigos, allegados y familiares de la víctima del ataque logró disuadir al atacante en su actitud y de acuerdo al relato fiscal, Roberts se retiró del lugar empuñando el arma blanca, subió a su automóvil y en momentos que se retiraba del lugar un grupo de personas empezó a arrojar distintos elementos contundentes, principalmente piedras y botellas, una de las cuales impactó en el auto y rompió uno de los cristales del rodado. Esta situación habría enardecido aún más al acusado, lo que provocó que el sujeto diera la vuelta con el vehículo e intentara atropellar a la víctima.
La situación antes descripta se habría repetido en al menos cinco oportunidades, logrando en una de ella atropellar a Brizuela. La víctima cayó y logró reincorporarse, a lo cual el atacante bajó de su auto e inició una persecución a pie y puñal en mano, hasta que la víctima cae nuevamente al piso y otra vez arremete con un segundo ataque mediante utilización de armas de fuego.
Segunda víctima
En ese contexto intervino en el hecho una persona identificada como Luis Hueicha, quien trató de impedir un ataque mortal hacia Brizuela, quien ya evidenciaba signos de no poder defenderse, y toma del brazo al atacante para que cese en su accionar. Ante esta situación, Roberts se incorporó, asestó un fuerte golpe de puño a Hueicha y luego le aplicó una puñalada en la zona abdominal, dejándolo tendido en el suelo.
Ya para ese momento y ante los insultos y recriminaciones de un centenar de personas que filmaban lo que sucedía, Roberts se subió junto a su acompañante y se dan a la fuga, a gran velocidad. Durante la huida fueron perseguidos por un móvil policial hasta llegar a un domicilio, donde estacionaron y allí el acusado habría intentado resistirse al accionar policial, tras lo cual fue detenido.
De la intervención policial surgió el secuestro de al menos dos cuchillos y pertenencias de una de las víctimas, una de las cuales permanecía hasta el día de ayer en terapia intensiva del hospital zonal.
En función de lo todo lo expuesto, el fiscal general Lucas Koltsch solicitó la continuidad de la prisión preventiva hasta la audiencia preliminar. Fundamentó su pedido en la extrema gravedad de los sucesos, el desprecio absoluto por la vida ajena, la conducta evasiva de fuga desplegada por Roberts, ante la persecución policial. Además, agregó el fiscal general que se mantienen vigentes los peligros procesales ya evaluados y que fundamentaran la medida de coerción actual.
Postura de la defensa
A su turno, el Dr. Fabián Gabalachis en su rol de defensor particular del acusado, describió el perfil de su asistido destacando que no cuenta con antecedentes, fundamentando en ese sentido que se debía imponer al mismo una medida de coerción menor. Explicó a la jueza que la conducta de su asistido durante el día de los hechos pudo deberse al consumo de alcohol y agregó que no se trata de una persona peligrosa y afirmó, que cree, nunca más vaya a tener un conflicto como ese. En tal sentido informó que su asistido está en pareja, tiene cinco hijos, indica que es sustento de la familia y hace cinco meses que no puede trabajar, generándole un problema económico.
Gabalachis consideró excesivo que continúe bajo esta modalidad. En función de los peligros procesales para mantener la medida de coerción manifestó que no se encuentran presentes tal como manifestó el MPF haciendo hincapié en la calificación legal escogida hasta el momento, dando a entender que podría tratarse del delito de lesiones graves en lugar de la actual, tentativa de homicidio. En cuanto a otros peligros procesales como el entorpecimiento de la investigación, manifestó que hasta el momento y desde el inicio de la investigación no han recibido ninguna denuncia respecto de las víctimas en ese sentido. Por todo ello solicitó la libertad de su asistido y se imponga que en forma diaria concurra a firmar y asimismo se dicte la prohibición absoluta de contactarse por cualquier vía con las víctimas.
Decisión de la jueza
La Jueza Penal María Tolomei consideró que de acuerdo a las características de los hechos por los cuales se dispuso originalmente la prisión preventiva y que revisten extrema gravedad de acuerdo a como se produjeron, se advierte una sucesión de decisiones para atacar a las víctimas, luego huir y además enfrentar al personal policial que lo perseguía. Además, agregó que, si bien no se presentó entorpecimiento de la investigación, eso se debe a que el imputado está privado de la libertad. Y para el peligro procesal de fuga, argumentó que se tiene en cuenta la persecución policial que protagonizó hasta que llegó a su casa.
Por todo ello resolvió prorrogar la medida de coerción que pesa sobre Alejandro Roberts hasta la realización de la audiencia preliminar en función a los argumentos vertidos por las partes y en orden al delito de tentativa de homicidio, dos hechos en concurso real en carácter de autor.
INFORMA: Agencia de Comunicación Judicial / Superior Tribunal de Justicia