El juez penal Gustavo Castro escuchó este jueves los alegatos de las partes en el marco del juicio por la muerte de la perra Tita, el can que fue mortalmente herido por un disparo de arma de fuego realizado por un empleado policial a fines de marzo del año 2020 en Playa Unión.
Tanto el fiscal Fernando Rivarola como el abogado querellante, Dr. Damián D’Antonio, solicitaron que el policía Elías Saavedra sea declarado responsable de los delitos imputados y pidieron una pena de prisión e inhabilitación especial para el mismo, aunque con diferentes criterios en cuanto a los plazos de cumplimiento, mientras que los defensores particulares del imputado pidieron su absolución.
El primero en alegar fue el fiscal Rivarola junto con la Dra. Eugenia Domínguez, funcionaria de la fiscalía de Rawson. En su exposición, indicaron que durante el juicio quedó probado el hecho ocurrido el 26 de marzo del 2020 frente a una vivienda ubicada sobre calle Teniente Coronel Roa 2202 de Playa Unión, y la responsabilidad del oficial Elías Saavedra en el hecho.
Rivarola aseguró que lo ocurrido en el lugar fue un biocidio, que, de acuerdo a la definición vigente, es todo aquel acto que implique la muerte de un animal y describió los hechos que dieron fin a la vida de la perra Tita, para asegurar que la intención clara de Saavedra fue disparar contra el can.
El fiscal reconoció que el animal pudo haber dado “un topetazo” con la boca abierta al policía y ello haber generado una herida menor, pero desestimó un ataque que pusiera en riesgo la integridad física del uniformado y que ameritara su reacción, extrayendo su arma reglamentaria, cargándola y disparando.
La fiscalía pidió que se condene a Saavedra como autor del delito de daño y abuso de autoridad, por haberse excedido en el uso del arma reglamentaria y en ese sentido la Dra. Domínguez solicitó una pena de un año de prisión y el doble de inhabilitación para el manejo de armas de fuego.
La querella por maltrato
El Dr. D’Antonio, quien representa en su rol de abogado querellante a la dueña de la perra muerta, afirmó que si bien coinciden con la acusación de la fiscalía, para ellos está claro que no solo el can no mordió al policía, sino que también Saavedra mintió, o bien al hacer la denuncia, o bien en el juicio.
El abogado sostuvo que a diferencia de la fiscalía, ellos si consideran que se trató de un caso de maltrato animal, sumado a los ya existentes por abuso de autoridad y daño. En ese punto solicitó una pena de dos años de prisión y el doble de inhabilitación para ejercer el cargo en el que se venía desempeñando. También pidió que se disponga para el acusado la realización de un tratamiento psicológico durante el primer año de la pena, además de un curso sobre derechos humanos, y sobre la utilización de armas de fuego. Por otra parte pidió la prohibición de acercamiento y contacto a Marionella Castillo y toda su familia.
“Mataron a mi hija no humana”
Marionella Castillo, la dueña de Tita, habló al terminar el alegato del abogado de la querella y aseguró que Saavedra “asesinó a una hija mía, una hija no humana, pero para mi era una hija, así la siento” indicó la mujer, quien aseguró haberse sentida intimidada por la forma en la que el acusado se dirigió a ella en audiencias anteriores.
Entre lágrimas, la mujer relató la relación que tenía ella y sus hijos con la mascota muerta. En ese punto reiteró que la intención de Saavedra nunca fue disuadir al animal para que no lo atacara sino directamente matarlo.
La defensa alegó contradicciones
Los defensores particulares de Saavedra aseguraron que ni la fiscalía ni la querella pudieron probar con éxito la teoría que plantearon desde el inicio del juicio respecto a la intención del policía de matar a la perra.
El Dr. Martín Castro hizo referencia a contradicciones y notorias modificaciones en el testimonio de Marionella Carrizo desde su primera denuncia hasta el debate, además de cuestionamientos a lo dicho por algunos testigos.
Aseguraron que no se ha podido probar el dolo directo, “no hubo intención de dañar al animal” y afirmaron que incluso existe una colisión entre las figuras jurídicas utilizadas por la acusación.
La sentencia se dará a conocer el jueves de la próxima semana.
INFORMA: Agencia de Comunicación Judicial / Superior Tribunal de Justicia